domingo, 15 de abril de 2007

Sugerencias para actuar a la llegada de los brigadistas

Las siguientes son las sugerencias llegadas a FENASOPADRES para actuar a la llegada de los brigadistas:


Primero.- Promover una estrecha alianza entre la Directiva de la institución y las Junta Directiva y Delegados de las SPRs. ¿Con qué objeto? Con el objeto de que sean los padres y no la Dirección y/o los docentes, quienes serena y firmemente aclaren que no tiene asidero normativo alguno el ingreso no autorizado a los planteles por parte de personas o grupos ajenos a la institución. ¿De qué manera? Sin aspavientos, sin destemplanza. Aún cuando se permitan alegar que el Ministerio de Educación los ha juramentado, el principio de legalidad, espinazo del estado de derecho, define las atribuciones y límites de todos los funcionarios públicos y no hay, hasta ahora, fundamento legal para que, sin autorización de los padres, los brigadistas puedan entrar libremente a las instituciones educativas e interactuar con nuestros hijos o representados.


Segundo.- Acordar con la directiva del plantel, que, conforme a las normas vigentes, nuestros hijos no participarán sin nuestra expresa autorización en actividades extracurriculares. Porque, como es de todos conocido, la escuela está obligada a solicitar por escrito a los padres y representantes la indicada autorización, a fin de que los alumnos participen o no en actividades programadas fuera del curriculum, o, cuando menos, deberá informarles con suficiente antelación. Esta información previa deja al padre en libertad de manifestar o no hacerlo su correspondiente asentimiento o incluso de enviarlo o no a la escuela el día o en el horario en que se planifique la actividad en cuestión. Lo esencial es que la visita no se realice a espaldas de los padres y sin su conocimiento suficiente y a tiempo. Y así proponemos que sea ratificado conjuntamente con la Dirección del Plantel. Previendo que esta situación pudiera presentarse de improviso, la JD/SPR y los Delegados deberán estar muy atentos para garantizar su presencia en ese momento en el plantel.


Tercero.- Aún cuando aparezcan muy aguerridos y comprometidos con la Misión Moral y Luces, debemos recordarles que en un régimen de derecho nadie está facultado para violar las normas constitucionales, legales o reglamentarias. También hemos de recordar que los brigadistas son muchachos y nosotros padres. No debemos olvidar nunca esta premisa que le proporciona fundamento moral y ventaja a nuestra posición. Estamos en nuestra escuela, en nuestra casa, en nuestro patio. Y nuestra casa y a los nuestros, cuando somos padres, sabemos como protegerlos, mejor aún si nos asiste la ley, como en este caso.


Cuarto.- Debemos estar bien informados y preparados para, por la vía de la racional exposición de los hechos, evidenciar nuestra incontrovertible fortaleza y si fuere el caso hacerles ver que no tienen razón, por supuesto en la hipótesis de que procedieran en la forma que aquí se expone. ¿Qué significa esto? Pues que de darse el escenario de no poder impedir el ingreso de los brigadistas hemos de conocer muy bien los argumentos y contrargumentos legales que puedan ventilarse, incluso los ideológicos y las invocaciones a la autoridad moral del Padre de la Patria. Dado que con frecuencia se menciona el Discurso del Libertador en el Congreso de Angostura para intentar justificar acciones que se aparten de su pensamiento, recordar que en ese mismo histórico documento hay pasajes de profundo contenido social, humano y democrático en los que se defienden los derechos ciudadanos y se consagran principios republicanos fundamentales como el de la alternabilidad de los mandatarios legalmente electos, con el fin de evitar males insoportables para las Repúblicas emancipadas.


Cualquier consulta o requerimiento, pueden comunicarse a
fenasopadres@gmail.com